Que una elevada contaminación acústica hace enfermar a las personas es un hecho que confirman estudios especializados una y otra vez. Para SENNEBOGEN este ha sido un motivo suficiente para implicarse desde hace ya tiempo en la cuestión de la reducción del ruido. El ejemplo de la Serie E actual muestra cómo se prioriza la generación de ruido desde la fase de desarrollo de los productos.
En el año 1989, con el encargo para desarrollar la «excavadora más silenciosa del mundo», SENNEBOGEN atrajo la atención en la materia de reducción del ruido. Entonces, el nuevo desarrollo fue galardonado por el Ministro de Medio Ambiente bávaro con el sello de calidad ambiental «Ángel Azul», una historia de éxitos que continúa hasta nuestros días. En la actualidad, la última generación de máquinas manipuladoras verdes impresiona con sus excelentes valores en materia de emisión acústica. La nueva SENNEBOGEN 821 es un ejemplo evidente de lo que se puede hacer para proteger al conductor y al medioambiente.
Durante el proceso de desarrollo de una máquina nueva, el estudio técnico de ruido empieza a tomar cuerpo en la temprana fase de diseño. Los registros efectuados con las llamadas cámaras acústicas ayudan a localizar los focos de ruido y a contrarrestarlos con eficacia. A menudo, las cosas más pequeñas pueden tener grandes efectos en la generación de ruido. Un método efectivo es minimizar las vías de transmisión de sonido y de vibraciones. Por ejemplo, durante el desarrollo de la nueva Serie E se desacoplaron los soportes del motor de los elementos exteriores de chapa para evitar oscilaciones resonantes. Del mismo modo, las fuentes secundarias como los conductos hidráulicos y los haces de cable se sujetaron elásticamente para evitar una resonancia innecesaria. El motivo: en última instancia, todo componente que puede oscilar constituye una fuente de ruido potencial. El amplio aislamiento de la superestructura giratoria también es un buen medio para reducir las emisiones acústicas. Por ello, la superestructura giratoria de la 821 Serie E se ha revestido de manera sistemática con esteras aislantes altamente efectivas.
Las máquinas de SENNEBOGEN se someten a menudo a difíciles jornadas de varios turnos sin fin, lo que supone una gran solicitación del sistema de refrigeración. Aquí es necesario actuar. El cálculo es simple: cuanto más fácil lo tenga la corriente de aire para pasar a través del sistema de refrigeración, menor será el ruido generado durante este proceso. La nueva 821, a diferencia de su predecesora, está equipada con un radiador y un ventilador de grandes dimensiones. Las generosas secciones de flujo permiten pasar al aire hasta el compartimento del motor sin que apenas encuentre resistencia. De este modo se puede hacer circular el caudal de aire necesario con una velocidad reducida. La velocidad reducida del ventilador, por tanto, significa velocidades de aire bajas y, con ello, una menor generación de ruido. Un control inteligente regulado por temperatura se encarga de que el ventilador tan solo funcione cuando realmente se deba evacuar el calor. La regulación de la velocidad del ventilador también tiene en cuenta las temperaturas ambiente. Cuanto más frío sea el entorno, más fácilmente se podrá evacuar el calor necesario y la velocidad del ventilador se puede mantener al nivel más bajo posible. Un efecto secundario positivo: también se reduce el consumo de combustible. En último extremo, las generosas dimensiones del sistema de refrigeración permiten utilizarlo a temperaturas superiores a los 50 °C. Este margen evidencia que SENNEBOGEN no ha conseguido optimizar el ruido comprometiendo el rendimiento habitual de la máquina, sino que ya buscaba la interacción óptima de todos los componentes del sistema desde la fase inicial del diseño.
Los ejemplos de optimización del ruido mencionados hacen que la máquina sea notablemente más silenciosa y se pueden confirmar con valores numéricos. Los prototipos de la nueva SENNEBOGEN 821 Serie E ya alcanzaron niveles de intensidad acústica de 99 dB e inferiores. Por tanto, la nueva máquina tiene un valor 3 dB inferior al de la serie anterior, lo que equivale de manera efectiva a una reducción de la mitad del nivel de intensidad acústica anterior.
Como resume Florian Krinner, ingeniero de desarrollo de SENNEBOGEN: «En total, con la optimización de la máquina se consiguió reducir el nivel de intensidad acústica aproximadamente 3 dB. Esto significa que dos máquinas de la Serie E actual juntas no generan más ruido que una sola máquina de la generación anterior.» En un estudio de la OMS relativo a los efectos del ruido en nuestra salud y calidad de vida de 2011 se determinó rotundamente cuán perjudicial es la exposición a una contaminación acústica intensiva. De acuerdo con este estudio, uno de cada tres europeos está expuesto a una contaminación acústica excesiva durante todo el día; las consecuencias son desde falta de concentración y trastornos del sueño hasta afecciones cardiovasculares. Los ámbitos de aplicación clásicos de las máquinas manipuladoras son desguaces y empresas de reciclaje. El nivel de ruido en estas instalaciones ya es elevado de por sí a causa de factores condicionados por el entorno. Por tanto, aún resulta más importante insonorizar lo máximo posible el lugar de trabajo del conductor de la máquina, tanto dentro como fuera de la cabina. Con la conversión a la cabina confortable Maxcab se consiguió reducir también la inmisión de ruido en la cabina. Las mediciones actuales confirman valores de 70 dB e inferiores.
Fotografía:
Las exhaustivas medidas adoptadas para reducir el ruido, la insonorización y un control inteligente del ventilador convierten a la SENNEBOGEN 821 de la Serie E en una compañera silenciosa en tareas de manipulación de material.
Última tecnología: los registros efectuados con la cámara acústica son una parte tan importante del proceso de desarrollo como las pruebas realizadas en el puesto de medición de ruido.
Dr. Franziska Limbrunner
SENNEBOGEN
Maschinenfabrik GmbH
Sennebogenstraße 10
94315 Straubing